Las MSyC se conocen como sistemas monetarios paralelos, o paramonedas y no nacen para reemplazar la moneda oficial, sino como un complemento que permite generar un medio de aceptación y pago, y con ello se movilizan recursos locales improductivos u ociosos. Destacan entre sus características su sencillez como sistema y uso en comunidades, así como su apoyo a la reactivación económica. Las MSyC se impulsan como medio de promoción de liquidez monetaria donde su coexistencia con monedas convencionales es favorable para la estabilidad de precios, generación de empleo e incremento de la productividad.
DOI: 10.13140/RG.2.2.21336.06401
El dinero, según Lietaer (2001), es un acuerdo voluntario de la comunidad para la aceptación de “algo” como medio de pago en sus transacciones; sin embargo, cuando de las funciones del dinero se destaca la de “depósito de valor”, automáticamente presiona su escalada acumulativa apoyada por el interés que reditúa. Ese efecto, hace que quienes apoyan economías solidarias donde se involucran las MSyC consideren al interés como factor promotor de disfuncionalidades y perversiones económicas-morales dado que promueve la concentración desproporcionada de la riqueza, fomenta la competencia sistemática y propicia el crecimiento económico interminable.
Como alternativa al concepto de interés, el precursor de las MSyC y de la oxidación de la moneda, Silvio Gessel en su libro The Natural Economic Order (1916) presenta a la oxidación – caducidad del dinero- como la cualidad del dinero de disminuir su valor a lo largo del tiempo. Esta es una de las características importantes de las MSyC, pues permite evitar la acumulación del dinero, incentiva la circulación rápida de aquel y fomenta su intercambio.
¿Qué son las Monedas Sociales y Complementarias ?
Las MSyC son un medio de intercambio con fines sociales, de alcance inmediato, gerenciado por la comunidad. Su implementación diversa y constante a la par del dólar –en el caso de Ecuador-, ayudan a mitigar la presión sobre una moneda única, fomentan la velocidad en transacciones que se consideran necesarias para dinamizar la economía y ayudan a reducir la salida de divisas. En MsyC, el sentido de comunidad puede sustituir al Capital y la priorización de la velocidad versus oferta monetaria.
Expertos en el tema indican que las paramonedas son propicias en entornos donde existe: 1) carencia de medios de pago –como lo hacen las comunas alejadas del sistema financiero, sin bancarización-, 2) inflación elevada, 3) elevadas tasas de interés asociadas a la moneda oficial, 4) hiperinflación -como en Argentina con el sistema de “patacones”-.
Bernard Lietaer (2019) fue un experto prestigioso que promovió el uso de monedas complementarias (resaltando su cualidad de oxidación monetaria y la propuesta C3 para Ecuador) y enlistó algunos de los posibles emisores de MSyC, siendo estos: gobiernos, alcaldías, grupos de empresas y comunidades. De esta lista reconoce que sistemas como la acumulación de millas de aerolíneas, clubes de compras y puntos, más que ser programas de fidelización, son mitigadores del uso de la moneda oficial contribuyendo a generar transacciones de compra-venta bajo sus sistemas de valoración y retribución a sus clientes.
Las Monedas Sociales y Complementarias en Ecuador
Hay tres referencias documentadas de iniciaticas de MSyC en Ecuador las UDIS (2011), Jurupi (2020) y Muyu (2020) que muestran el potencial de crecimiento de desarrollo.
Las UDIS (Unidad de Intercambio Solidario) fueron promovidas por STRO de Países Bajos, junto a la Fundación Pachamama y la Red Nacional de Finanzas Populares y Solidarias. A pesar de su positivo impacto económico en Sinincay, Cuenca, la iniciativa fue suspendida indefinidamente días después de su implementación, debido a obstáculos legales, ya que la Superintendencia de Bancos y el Banco Central percibían que las UDIS eran un sustituto monetario no regulado (El Universo, 2011).
El Jurupi y Muyu fueron monedas virtuales que surgieron en la pandemia con el objetivo de impulsar la solidaridad a través del intercambio de bienes y servicios. Hasta su retiro en 2022, circularon 70,000 muyus, siendo el Muyu más exitoso con 60 miembros (El Universo, 2021) comparado con el Jurupi. Sin embargo, ambas monedas dejaron de circular por la falta de aceptación en locales comerciales.
Existen otros sistemas de paramonedas en Ecuador identificados por su forma de ejecución como: Clubes de Trueque, Bancos del Tiempo y Clubes de Acumulación de Puntos y Canje.
Los Clubes de Trueque son sistemas en los que existe intercambio de bienes sin que se involucre una moneda física para motivar el principio de reciprocidad y solidaridad (UNESCO, 2022). Existe referencia documentada de tres iniciativas: Trueque Escolar en Quito, Pichincha (2019), Trueque Guayaquil en Guayas (2015) y Trueque del Sol -cambeo- en el pueblo de Pimampiro, Imbabura. De ellos, el Trueque del Sol mantiene vigencia y se suele dar en Semana Santa.
Los Bancos del Tiempo son sistemas comunitarios en el que se ofrecen servicios, habilidades y conocimiento a cambio de otros, sin optar por el uso de un beneficio tangible. Como ejemplos, el Banco del Tiempo Loja fue incentivado en 2017 por la Universidad Técnica Particular de Loja y la Cátedra Unesco de Cultura y Educación para la Paz (UTPL, 2017) y el Banco del Tiempo de la fundación Esquel (BdT) en 2019, presente en redes sociales donde se ofertan talleres y conferencias de índole variada.
La propuesta de mayor cobertura a nivel nacional ha sido la de Clubes de Acumulación de Puntos y Canje para futuras compras, que además de fidelizar clientes, generan un ecosistema de transacciones de compra en el negocio y aliados con los puntos acumulados por sus compras previas. La oferta es amplia y diversa como: supermercados, cafeterías, tarjetas de crédito, aerolíneas, entre otros.
Conclusión
Con el impulso de MSyC, usualmente promovida por comunidades ajenas al sistema financiero, se reduciría la presión hacia una moneda única y se lograría generar la liquidez perseguida vía velocidad del dinero, sin emisión monetaria como lo refiere la teoría monetaria tradicional y a la que de paso, Ecuador no tiene acceso.
Si bien es cierto, los Clubes de Acumulación de Puntos y Millas de Canje son la propuesta con mayor repercusión y presencia a nivel nacional, por su atractivo de obtención de beneficios en compras; la opción de Bancos de tTempo tiene el potencial de direccionar a los ciudadanos hacia la colaboración, apoyo y crecimiento comunitario.
Con un sentido de comunidad y con el actual entorno favorable respecto a digitalización y conexión, las paramonedas tienen un espacio ideal de desarrollo al complementar al capital, aliviando la presión de la demanda en una moneda única, fortaleciendo la liquidez de la moneda oficial e inclusive reduciendo el costo de financiamiento por el principio de oxidacion pertinente en ellas.
Necesario es buscar mecanismos para mitigar la presión que actualmente tiene el dólar tanto en su uso como en la salida de divisas. Al respecto la administración pública puede educar, concertar y difundir acciones sencillas para el uso de las monedas complementarias, su fomento y desarrollo desde la comunidad; esfuerzos y actividades complementarias, que permitan fortalecer la estabilidad económica y monetaria.
Por: Silvia Mariela Méndez Prado *, Helen Angulo Lindao
*Profesor titular de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanísticas de ESPOL
smendez@espol.edu.ec
Palabras Clave:
ü Monedas sociales
ü Reactivación económica
ü Liquidez
ü Ecuador
Highlights:
ü Las medidas de inyección de liquidez realizadas en diferentes momentos en la economía ecuatoriana no han logrado frenar la salida de divisas al exterior.
ü Las MSyC ayudan a mitigar la presión sobre una moneda única, fomentan la velocidad en transacciones que se consideran necesarias para dinamizar la economía y ayudan a reducir la salida de divisas.
ü La oxidación del dinero permite evitar la acumulación del dinero, incentiva la circulación rápida de aquel y fomenta su intercambio.
ü Ecuador ha implementado paramonedas pero sin un reconocimiento significativo.
ü Los clubes de acumulación de puntos y millas de canje son la propuesta con mayor repercusión y presencia a nivel nacional, por su atractivo de obtención de beneficios en compras.La administración pública debe concertar y difundir acciones sencillas para el uso de las monedas complementarias, su fomento y de
No hay comentarios:
Publicar un comentario