Please feel free to read and cite any published document: Silvia Mariela Méndez Prado, smendez@espol.edu.ec ESPOL Polytechnic University, Escuela Superior Politécnica del Litoral, ESPOL, Faculty of Social Sciences and Humanities, Campus Gustavo Galindo Km 30.5 Vía Perimetral, P.O. Box 09-01-5863, Guayaquil, Ecuador.

lunes, 26 de julio de 2010

EVASION TRIBUTARIA EN AMERICA LATINA. Los mayores niveles de inequidad regional

Luego de participar en un Estudio de Justicia Tributaria para Latinoamérica,  el documento muestra un extracto de los resultados del mega estudio desarrollado para SOMMO-LATINDADD y Tax Justice Network.

Si para Latinoamérica en el siglo XX los 80s fueron la década perdida, los 90s la etapa de relativo auge, entonces el final de esta primera década se vislumbra como una etapa de seria reflexión sobre el crecimiento económico dispar y hasta negativo de algunos de sus integrantes en el marco de la crisis financiera internacional.


En los periodos citados la constante ha sido la permanente inequidad demostrada por estadísticas de la CEPAL / Panorama Económico y Social que ubican al 33% de la población de América Latina en niveles de pobreza equivalentes a 180 millones personas.

Bajo ese comportamiento del ciclo en América Latina (AL), Si el mundo toma en serio el cumplimiento de los objetivos de desarrollo del milenio, se deben dar pasos firmes que generen soluciones sobre temas que requieren cooperación internacional como fiscalidad, comercio, deuda externa y ayuda internacional.

El incremento en ingresos fiscales en América Latina -heterogéneo entre sus integrantes- hasta antes del 2008, se explica no solo por el mayor crecimiento y relativa estabilidad experimentados en esos anos, sino el aumento de la recaudación indirecta (impuesto en las ventas), incremento de ingresos por venta de materias primas como petróleo, metales en algunos países y en otros el incremento de medidas tendientes a fortalecer el sistema tributario, reducción de exenciones y mejoras en la recaudación y fiscalización.

Según la revisión de estadísticas de composición de ingresos tributarios, en los estados latinoamericanos existe un alto sesgo a mantener impuestos al consumo, por su facilidad para recaudar, para aumentar la base de contribuyentes y para ahorrar el costo de monitoreo y fiscalización que suponen los impuestos directos. Así, la recaudación de estos últimos disminuye ante una reducida base de contribuyentes, Afectando fuertemente a los estratos de ingreso medio y bajos.

Lo cierto es que un crecimiento con alta dependencia hacia los impuestos indirectos tiene una alta sensibilidad a la variación de los ciclos económicos y genera mayores niveles de regresividad; pues, al afectar al consumo no discriminan a los contribuyentes por sus niveles de ingresos como lo procuraría un impuesto directo, el impuesto a la renta.

Adicionalmente es importante incorporar en el análisis, la problemática de la fuga de capitales lícita e ilícita que no tributa, usando vastos mecanismos de evasión y elusión y que por su magnitud representan una importante fuente de ingresos impositivos no recaudados, obligando a los estados a requerir créditos y ayudas internacionales para el financiamiento de sus presupuestos.

La fuga de capitales es un tema latente a nivel mundial cuyo origen se justifica en la búsqueda de un escape a la inestabilidad política y económica, al temor a la: confiscación, inflación y tributación; pero sobre todo, a evitar el control de los niveles de acumulación de riqueza en los lugares de explotación económica;

El círculo vicioso es marcado, los capitales de multinacionales y de particulares buscan mecanismos de evasión en los paraísos fiscales, evadiendo su compromiso de pago de impuestos necesarios para la redistribución de la riqueza y convirtiendo a los países deficitarios en demandantes permanentes del crédito y ayuda internacional.

CIFRAS SOBRE EVASION E INEQUIDAD

Un estudio reciente, "The implied trade revenue losses from trade mispricing" , publicado por Global Financial Integrity, estima que el promedio de pérdidas de ingresos fiscales en los países en desarrollo provocadas por la distorsión de los precios del comercio que se produce a través de la re-facturación se situó entre 98 mil y 106 mil millones de dólares anuales entre los años 2002 a 2006, que representó una pérdida promedio de alrededor del 4,4% de los ingresos totales por impuestos en el mundo en desarrollo.

Christian Aid, organización internacional, ha cifrado que para AL la pérdida es de US$ 50 mil millones, lo que representa según estadísticas de atención medica, una pérdida de 300 vidas de niños menores de 5 años cada día.

En aproximaciones sobre el cálculo de evasión en América Latina en el 2010 . se destaca que esta región presenta las más alta desigualdad distributiva, donde la mayor cantidad de riqueza se concentra en un pequeño sector de la población. Al respecto, el coeficiente de Gini para esta región es del 0,53, el de la OCDE es del 0,31 y el de EEUU es 0,38, lo que demuestra un mayor nivel de concentración de riqueza para AL; es decir, un 70% más del promedio de la OCDE, según estudio de CEPAL y OCDE (ver gráfico 2).

En AL existe una baja recaudación tributaria. Se tributa poco y mal, ya que los sistemas tributarios están caracterizados por:

1. Baja presión tributaria. Según datos de la OCDE la presión tributaria ha crecido significativamente ubicándose en el año 2006 en 20.2% del PIB total de AL, pero aun así es inferior a los máximos y mínimos europeos entre el 51% de Suecia y del 27.3% de Grecia. Además, el incremento señalado esta sostenido por los impuestos indirectos. (ver gráfico 1).

2. Estructura sesgada hacia impuestos regresivos. Entre el año 2007 y 2008, el promedio de ingresos respecto del PIB en América Latina se mostró desigual y altamente dependiente de los impuestos indirectos, relacionados con las ventas y consumo de bienes y servicios representando aproximadamente la mitad de los ingresos tributarios de los países de América Latina.
México es el único país donde el 60% de los ingresos tributarios provienen del impuesto a la renta y donde los impuestos al consumo son los segundos más bajos de la región. Otros países que tienen entre un 40 a 50% de recaudación en impuesto a la renta del total de ingresos tributarios son: Chile, Colombia, Panamá, Perú y Venezuela (los especializados en explotación de recursos naturales). Sin embargo, estos estándares siguen siendo muy bajos en comparación con los estándares internacionales y no son suficientes para producir una mejora en la distribución de ingresos en la región. (Ver gráfico 3).

3. Tasas elevadas de evasión y elusión explicadas por el uso de precios de transferencias y altos niveles de informalidad. Los rangos de evasión tributaria varían entre el 40% y 65%, que representa el 4.6% del PIB. En la muestra, Ecuador y Guatemala tienen los mayores indicadores. Al ser altos estos índices, afectan a la equidad horizontal (donde todos tienen la misma carga tributaria) como a la equidad vertical (y en donde los que más capacidad contributiva tienen, acceden más fácilmente a la evasión tributaria) (ver gráfico 5).

• El tamaño de la economía informal del año 1990 se muestra en un 34% del PIB, y en el 2003 aumenta a un 43%, mayor que lo referido para África y 3 veces superior al promedio de la OCDE. (ver grafico 4)

• Según estudio de Justicia Tributaria SOMO-LATINDADD 2010 sobre efectos de manipulación de precios de transferencia, de los 17 países analizados, en el 2007 se generaron US$ 14 mil millones por pérdidas tributarias, el 90% de estos valores corresponden a Brasil y México.

Adicionalmente, Según CEPAL/Panorama Social para América Latina, las últimas estimaciones disponibles indican que en el 2008 un 33% de la población se encontraba en situación de pobreza (180 millones de personas), de las cuáles la extrema pobreza o indigencia abarcaba a un 12,9% de la población (71 millones). (ver gráficos 7)

Existe un componente de heterogeneidad en la región: Argentina, Chile, Uruguay y Costa Rica dado que presentan niveles de pobreza del 22% y entre 3 y 7% de indigencia, mientras que Bolivia, Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua y Paraguay alcanzan niveles del 50 y 30%, en pobreza e indigencia respectivamente.

Estas diferencias en los resultados de indicadores de indigencia y pobreza de los países tienen un importante impacto en la capacidad de las administraciones tributarias para recaudar impuestos.

Por ello, se requiere una eficiente distribución a través del gasto social, mediante una estructura de financiamiento no regresiva (que no sea soportada por los estratos medios ni bajos). Y que sea financiada en mayor medida por quienes más tienen (a través de impuestos directos como la renta o al patrimonio). Bajo ese contexto es imprescindible fortalecer políticas orientadas a mejorar la equidad social.

LA PROBLEMÁTICA DE LA EVASION:

“Es una contradicción aumentar la ayuda al desarrollo y hacerse de la vista gorda de las acciones de las multinacionales que socavan la base fiscal de un país en desarrollo. Los países más pobres (…) no tienen los conocimientos necesarios para desentrañar las complejas estructuras que las grandes empresas usan para minimizar los impuestos”. Trevor Manuel, Ministro de Finanzas de Sudáfrica.

Los paraísos fiscales han ido ganando terreno, incrementándose a 84 de los 4 que existían a mediados de los 60s, la motivación de algunos de ellos se justifica en su deseo de incentivar la inversión extranjera por la ausencia de carga impositiva; así, ellos esperan un incremento relativo en el empleo por la demanda de personal que las empresas requerirían.

Existen sofisticadas figuras operacionales para la evasión y elusión tributaria a través de los paraísos fiscales., de ellos los precios de transferencia tienen un papel importante que consiste en.

1. Vender los productos a costos inflados.

2. Vender los productos a precios de liquidación a una filial o empresa relacionada.

En Ecuador solo por el seguimiento a Exportadora Noboa, la determinación de la administración tributaria en el ano 2005 por evasión con precios de transferencia bordea los US$ 82 millones que servirían para el 40% del valor estimado de construcción del proyecto multipropósito Baba correspondiente a una Presa, embalse, trasvase y una central hidroeléctrica con líneas de transmisión con potencial de generación de 360 mil MW/ano.

PROPUESTAS PARA LA REDUCCION DE LA EVASION TRIBUTARIA

Entre otros, el sigilo bancario y leyes flexibles han permitido la manipulación de precios en el comercio por lo que se sugiere la determinación de reglas globales enfocadas para el incremento de los contribuyentes y su base impositiva, de tal forma que obliguen:

1. A las compañías a registrar sus activos, pasivos, capital, y estado de resultados por país donde operan, no en forma global como hasta ahora, lo que permitiría a los reguladores cruzar la información declarada

2. A las administraciones tributarias de cada país, al intercambio de información tributaria dado que las reglas actuales no funcionan, la cooperación no es dinámica y muchos de ellos pese a contar con convenios de doble tributación, no responden de manera inmediata o exigen el cumplimiento de formalidades con los tiempos de espera respectivo para cada requerimiento de información que impiden un control ágil entre ellas.

3. A las Superintendencias de compañías y de Bancos de cada país, al trabajo conjunto con la administración tributaria para el cruce de información y análisis de consistencia de los resultados mostrados para que sean aplicables sanciones relevantes que desincentiven las prácticas de evasión.

En este marco de exigencias de inclusión de contribuyentes evasores y elusores, requeridas por las ONGs Mundiales al gobierno francés en su futura presidencia del G20 del 2011.

Es necesario también se fortalezca el control del gasto público a través de la parametrizacion y la evaluación comparativa de los ratios de eficiencia promedios y segmentados por tamaño de economía.

En la determinación de estos ratios, su publicación comparativa y exigencia de aplicación minima se garantizarían niveles básicos de atención en áreas prioritarias como educación y salud, se exigiría una mayor calidad del gasto, equiparable a los desempeños más eficientes de países referentes a nivel global y/o regional.

Solo así puede exigir mayores cambios, aumentando controles a los contribuyentes pero exigiendo también mayor responsabilidad a las administraciones estatales sobre el uso eficiente de los recursos recaudados.









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